“La fe en Jesús llevó a los primeros cristianos a vivir en comunidades donde la convivencia era radical, hasta llevarla a prácticas impensadas para el primer siglo. Decir que en Cristo ya no había judio ni griego, ni hombre ni mujer, ni esclavo o libre, eran una imposibilidad social. Pero pasaron los siglos y la cristiandad occidental a grandes rasgos no solo guardó silencio sino que fue parte de muchos mensajes destilantes de odios y prejuicios. Qué pasó en el camino??”